“Los invito a la oración con el corazón, para que su oración sea una conversación con Dios. Yo deseo que cada uno de ustedes dedique más tiempo a Dios. Satanás es fuerte y quiere obstaculizarlos y engaarlos de muchas maneras. Por eso, mis queridos hijos, oren cada día, para que sus vidas sea buenas para ustedes mismos y para todos aquellos a quienes ustedes encuentren.”